El movimiento de protesta de Guatemala gana impulso a nivel nacional en 2024

En un giro significativo de los acontecimientos, el movimiento de protesta de Guatemala alcanzó una escala nacional en 2024. Las raíces de este movimiento se remontan a las manifestaciones históricas de 2015 que llevaron al derrocamiento del entonces presidente Otto Pérez Molina por acusaciones de corrupción. Si bien esas protestas fueron impulsadas en gran medida por la clase media urbana y no lograron reformas políticas más amplias, la actual ola de protestas parece preparada para tener un impacto duradero.

Las protestas masivas coordinadas, que comenzaron el 2 de octubre, han pedido la renuncia inmediata de la Fiscal General Consuelo Porras, quien busca desmantelar el partido Movimiento Semilla del presidente electo Bernardo Arévalo. A diferencia de protestas anteriores, este movimiento ha obtenido el apoyo de un sector diverso de la sociedad guatemalteca, incluidos estudiantes, trabajadores del sector público, profesionales de clase media, agricultores rurales y trabajadores del sector informal en pueblos pequeños y ciudades medianas.

Lo que distingue a estas protestas son sus claros objetivos políticos: defender los resultados de las elecciones del 20 de agosto, preservar el partido de Arévalo y asegurar su capacidad para gobernar eficazmente. Si bien las protestas comenzaron a disminuir el 16 de octubre, se espera que su impacto repercuta mucho más allá de las calles. Han galvanizado una coalición más amplia en apoyo de Arévalo, trascendiendo la base urbana que inicialmente lo impulsó al poder. Esta nueva unidad indica al Congreso y al poder judicial que Arévalo goza de un amplio respaldo popular y podría animarlo a abordar problemas de larga data de desigualdad rural y preocupaciones ambientales.

Con las comunidades rurales e indígenas apoyándolo, Arévalo está preparado para defender sus intereses y lograr un cambio significativo. Las protestas de 2024 no solo han remodelado el panorama político en Guatemala sino que también han subrayado el poder de la acción colectiva para promover la reforma social y política.